La Primera Entrevista: Iniciando el Proceso de Nulidad Matrimonial
- José Antonio Torres

- 16 jul 2019
- 2 Min. de lectura
Un paso muy importante para poder iniciar un proceso de NULIDAD MATRIMONIAL es la PRIMERA ENTREVISTA.
Cuando un matrimonio o uno de los cónyuges quiere comenzar un proceso de nulidad, se le aconseja acuda con un especialista o centro de orientación en el que se le recomendará entrevistarse con un asesor.
En la PRIMERA ENTREVISTA se trata de determinar dentro del iter biográfico, si hay dudas respecto a la validez del matrimonio contraído o si hay elementos para una posible nulidad.
Podría ayudar que quien desee promover su causa, conteste antes un breve cuestionario que permita partir de las respuestas y buscar profundidad en algunos aspectos.
Entre otros, se pueden tomar como base los siguientes puntos:
1º El conocimiento de las partes (¿Cómo se conocieron?)
2º El noviazgo.
3º La decisión de casarse.
4º Las condiciones y la intención prenupciales.
5º La condición psicológica y las circunstancias externas en el momento de la boda.
6º Los consejos y parecer de los familiares, amigos y sacerdotes.
7º La preparación remota e inmediata al matrimonio.
8º La celebración de la boda.
9º El período sucesivo, con particular atención a la procreación, o por lo menos a la adecuada integración sentimental-sexual, el nacimiento de los hijos.
10º Las dificultades o crisis matrimoniales.
11º Las circunstancias y causas de la separación o el divorcio.
12º La situación actual.
Se trata a partir de estos -u otros- puntos, de conocer la situación real de ese matrimonio y canalizarlo hacia donde pueda recibir la ayuda que necesita: un centro especializado de orientación familiar, o bien al Tribunal Eclesiástico.
También es aconsejable un especialista en el ámbito jurídico-canónico le ayude a asegurar la existencia de un interés legítimo y que pueda otorgar su parecer sobre la existencia del fundamento (fumus iuris) y motivos para solicitar la nulidad matrimonial.
El asesor jurídico canónico, en este caso, puede proponer un acompañamiento prejudicial y colaborar con la investigación prejudicial y la elaboración del escrito de demanda.
Como siempre, el primer consejo es ASESORARSE con un experto que pueda ayudarte a recorrer ese proceso.
Estamos a tus órdenes. Nos encantará ayudarte a aclarar tus dudas o leer tus comentarios.




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